La verdad no sé por dónde empezar porque hemos pasado tanto juntas que podría tirarme una eternidad escribiendo. Últimamente las cosas han cambiado bastante y no quiero que por eso cambie también esto. Creo que sabes que eres demasiado importante para mí como para dejar que te vayas de mi vida sin más. Aunque haya distancia entre nosotras nada va a ser diferente podrás llamarme siempre que quieras lo sabes porque estaré ahí apoyándote, como hasta ahora. Escucharé tus tonterías y tus problemas como he hecho siempre. Te ayudaré con lo que sea y daré la cara por ti cuando haga falta. Al fin y al cabo tú has hecho lo mismo por mí. Desde hace mucho somos como hermanas y la verdad nadie me conoce como tú. No me refiero a lo que cuento o a lo que no, sino a saber lo que me pasa sin decir nada, a saber cómo y cuándo sacarme una sonrisa, a ser capaz de callar en el momento justo o a no parar de hablar hasta hartarnos. Quiero que tengas en cuenta que no voy a dejar que nada nos separe y que lo siento. Lo siento por todos los ratos en los que te lo he hecho pasar mal o todos los momentos en los que por mi culpa te has perdido algo importante, sólo por estar a mi lado. Gracias por aguantarme o por reírme las gracias sin sentido. Por haber pasado conmigo tantos momentos inolvidables, por todas nuestras fotos e incluso por nuestras peleas que nos han hecho madurar y saber que ahora si algo va mal nos miramos y lo arreglamos todo. Gracias por esas conversaciones hasta las tantas de la mañana hablando de nada en especial porque es verdad que las echaré de menos cuando no estés. En realidad echaré de menos todo porque no puedo cambiarlo las dos sabemos que nada será igual. Así que bueno, sólo escribía para eso quería que lo supieras. Te quiero.
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